Amalita Jr., del museo al Cilindro de Avellaneda
La nieta de Amalia Fortabat es una apasionada hincha de Racing. Se enoja, festeja y grita en la platea de la cancha, donde va cada vez que su equipo juega de local.
Amalia Amoedo, la nieta de Amalita Fortabat es una apasionada hincha de Racing. La heredera de una de las más grandes fortunas del país suele ir a la cancha a alentar a La Academia.
Del arte a reuniones de beneficiencia directo al cilindro de Avellaneda, desde la platea A, una de las ubicaciones mejor acomodadas del estadio, grita goles, festeja y se enoja.
La semana pasada estuvo en la cancha y festejó cuando Racing le ganó por 3 a 1 a All Boys.
De 36 años de edad, Amalia se crió en una familia conservadora y millonaria, donde eran habituales los viajes a Punta del Este y Miami y conoció el fútbol gracias a su hermano Alejandro quien comenzó a llevarla a la cancha.
Un mujer multifacética, gusta del arte, lleva adelante emprendimientos empresariales y en su tiempo va a la cancha a mirar fútbol, un deporte popular.