Alud en Catamarca: 6 muertos y 8 desaparecidos
Las fuertes tormentas provocaron la crecida de los ríos. Además, por las inundaciones se evacuaron a 400 personas.
Un alud en la localidad catamarqueña de El Rodeo provocó la muerte de seis personas, en tanto que otras ocho se encuentran desaparecidas. Entre las víctimas fatales hay dos nenes de 6 y 7 años. El hecho sucedió en un camping cercano a una montaña, que cedió con las intensas lluvias. Hay, además, 400 evacuados.
Entre las otras víctimas están un hombre de unos setenta años de edad, de apellido Chumbita, que se encontraba desaparecido desde anoche, y una mujer identificada como Gladys Sandón, que murió anoche, cuando fue alcanzada por un rayo. La mujer falleció en la localidad de Fiambalá, del departamento Tinogasta, en medio de una intensa tormenta. En tanto, cinco de sus 11 hijos debieron ser internados.
Además de las víctimas fatales, el Secretario de Estado de Información Pública, Rodrigo González, confirmó que ocho personas están siendo buscadas en la villa veraniega y en la localidad de Siján, a 160 kilómetros de la capital provincial, ya que el fenómeno extremo azotó a toda la provincia en la noche de ayer.
En este contexto, la presidente Cristina Fernández de Kirchner se comunicó al mediodía con la gobernadora, Lucía Corpacci, para interiorizarse sobre la situación y "ofrecer la ayuda que la provincia requiera".
La intensa lluvia desatada en las últimas horas del jueves provocó graves consecuencias en diversos puntos del territorio provincial, especialmente en los departamentos Ambato y Pomán, donde se trabaja para asistir a los damnificados.
Corpacci convocó al Comité de Emergencias apenas ocurrido el temporal y a medianoche encabezó la comitiva que partió rumbo a Siján (Pomán), donde permaneció hasta las cuatro de la madrugada, para trasladarse luego a la villa veraniega de El Rodeo (Ambato), donde permaneció hasta este mediodía.
Las intensas precipitaciones desbordaron en pocos minutos los ríos Ambato y Hualfìn (en Belén), en tanto que en Pomán, por la inestabilidad del suelo se produjo un alud de barro y piedras que afectó a las localidades de Siján y Rincón.