Al borde del juicio por llamar a la suegra
Una camarera de un restaurante de la ciudad de Buenos Aires, tomó el teléfono que estaba en el mostrador de la caja para llamar a su suegra recién operada y fue demandada legalmente por robo.
La mesera quedó al borde del juicio oral y público, acusada de haber hurtado un celular con el cual llamó a su suegra, quien había sido operada por una dolencia física.
Así lo dispuso la Sala I de la Cámara del Crimen al confirmar el procesamiento contra la mesera de un restaurante de esta Ciudad, a quien se la acusa de haber hurtado el 17 de julio de 2009 de un teléfono celular "marca Nokia, modelo 1100, propiedad de Alicia Raquel Silva, quien se encontraba cenando allí", según la resolución judicial.
En la resolución, la Cámara rememoró que la imputada, con el celular hurtado, habría llamado a su ex suegra "para interiorizarse sobre su salud, por haber sido intervenida quirúrgicamente".
Al ser indagada, la camarera reconoció que llamó a su suegra pero aseguró que lo hizo "con un teléfono celular que estaba en el mostrador de la caja, desconociendo con posterioridad qué fue lo que habría sucedido con el aparato".
Luego de hacer el llamado con ese celular a su ex suegra, el celular hurtado recibió el mensaje: "ya estoy en casa y muy bien si querés llamame o pasá un ratito besos", corroborando la versión de la mesera.
Los camaristas Jorge Rimondi y Luis Bunge Campos consideraron probado que el celular hurtado estuvo en poder de la camarera, por lo que confirmaron su procesamiento y quedó al borde del juicio oral y público.