Aislar a las islas Malvinas
*Por Bruno Bologna. Primero nos roban las Malvinas, incluidas las Georgias del Sur y Sándwich del Sur, luego las aguas circundantes, el mar, más tarde, la pesca y ahora el subsuelo con el petróleo.
Cuando Naciones Unidas comienza con el proceso de descolonización en 1960, con la resolución 1.514, el Reino Unido inscribió entre los territorios a descolonizar a las islas Malvinas.
Casi todos los organismos internacionales apoyan la postura argentina que Gran Bretaña tiene que sentarse a discutir el tema de la soberanía. Sin embargo, ni como potencia colonial, ni como miembro permanente del Consejo de Seguridad esta potencia histórica acepta ninguna de las resoluciones o declaraciones emanadas de los organismos internacionales.
El primer ministro inglés, David Cameron, en un alarde de totalitarismo ha dicho: "Mientras las Falklands (Malvinas) quieran seguir siendo territorio soberano británico, deben seguir siendo territorio soberano británico. Punto final de la historia".
Tal vez con estas palabras: Quiere compararse con el clásico y fracasado pronosticador Francis Fukuyama cuando escribió en 1989 que una vez caída la Unión Soviética se produciría el "Fin de la Historia"; y por esa causa existiría un solo mundo bajo el dominio de los Estados Unidos.
O mostrar sólo con palabras la valentía para enfrentar las críticas de los sindicatos que proponen una huelga general para el 30 de junio en respuesta al plan del primer ministro de reducir el déficit, que incluye la reforma el sistema jubilatorio, avanzar con los planes de despidos masivos y congelamiento de salarios.
Frente a este atropello de la potencia colonial sugiero tres alternativas:
1 A largo plazo: las razones han sido expuestas por la presidenta de la Nación, Cristina Fernández, en Posadas, el 16 de junio cuando dijo que vamos a seguir reclamando en todos los foros internacionales, "vamos a decir que en el Siglo XXI siguen siendo una burda potencia colonial en decadencia, porque el colonialismo es algo antiguo además de injusto. Lo vamos a decir sin cansarnos. Y lo harán los que vengan después de mí y los hijos de nuestros hijos, pero las vamos a volver a recuperar en el marco del derecho internacional y de la paz, que no les quepan dudas".
2 A mediano plazo: luego de la denuncia argentina de los acuerdos sobre petróleo, firmados entre Argentina y Gran Bretaña, este país comenzó la exploración de hidrocarburos en la zona de Malvinas en febrero de 2010 cuando se instaló la plataforma Ocean Guardian, que presta servicios a varias empresas petroleras. La pionera en este campo fue la compañía británica Desire Petroleum que perforó a una profundidad de 3.570 metros admitiendo que el petróleo de la zona no era económicamente rentable.
La segunda empresa, Rockhopper, en cambio anunció que había ubicado un pozo con un potencial de 250 millones de barriles de crudo comercialmente viable.
Nuestro país reclama permanentemente en organismos internacionales sobre esta actitud unilateral de Gran Bretaña. Además, por un decreto del Poder Ejecutivo impone sanciones a las embarcaciones que haciendo escala en puertos argentinos, lleguen a las islas Malvinas para reabastecimiento de las empresas petroleras. En este sentido se debe destacar, que además de Argentina, Brasil y Uruguay han impedido la salida de embarcaciones de aprovisionamiento con destino a las islas.
Usando las palabras de Guillermo Makin, hay que dificultarles la exploración petrolera ("La Nación", 28 de febrero de 2010).
3 A corto plazo: aislar las islas Malvinas del continente americano. A partir del convenio firmado en 1999, entre el primer ministro Tony Blair y Carlos Menem, la empresa aérea LAN Chile realiza viajes semanales entre Punta Arenas (Chile) a Puerto Argentino en las islas Malvinas. Una vez al mes la mencionada empresa hace una escala en la ciudad argentina de Río Gallegos, provincia de Santa Cruz. Además de estos viajes regulares, LAN Chile efectuaba viajes charter entre Punta Arenas y Puerto Argentino. Para estos viajes, fuera de los establecidos, la empresa solicitaba permiso de sobrevuelo a la República Argentina.
Debe consignarse que el turismo es el segundo rubro de importancia para los ingresos de los habitantes de las islas Malvinas, luego de los ingresos por canon de pesca que otorga a embarcaciones extranjeras.
"Los vuelos de LAN entre Punta Arenas y las Malvinas son el principal vínculo de comunicación para los kelpers (y los 70 chilenos que viven en las islas). Cada año se movilizan 3.000 pasajeros entre las dos ciudades, en un viaje que dura una hora y media" (revista Viva, 12 de junio de 2011).
Ante el pedido de la empresa LAN de realizar vuelos charter entre Punta Arenas y Puerto Argentino, el 3 de noviembre de 2003 el gobierno argentino anunció que rechazaría la solicitud y propuso la fecha del 15 de febrero de 2004, como inicio de vuelos regulares entre nuestro país y las islas, por parte de una aerolínea de bandera argentina.
El impacto de esta decisión argentina tiene una fuerte repercusión en las islas Malvinas y en el Reino Unido.
El secretario de Estado británico para Asuntos Exteriores, Hill Rammell, en un informe al Parlamento de su país, el 19 de enero de 2004, se queja por el impacto negativo que tiene para los isleños y para la industria turística la decisión argentina de no autorizar una serie de vuelos extras de la empresa LAN Chile. Además Rammell viaja a nuestro país el 16 de febrero con el objetivo de restablecer los vuelos charter.
La decisión argentina no fue modificada. El canciller argentino de entonces, Rafael Antonio Bielsa, afirma que entre noviembre y diciembre de 2003 se han autorizado cinco vuelos charter a LAN Chile.
Ante la reacción del primer ministro inglés, David Cameron, de poner punto final al tema de disputa de soberanía sobre las islas Malvinas, se hace necesario tomar otro tipo de medidas para impedir el avance permanente del Reino Unido sobre el Atlántico Sur, considerando que en la actualidad nuestras relaciones con los países de América del Sur son excelentes a través de la Unasur y su Consejo de Defensa.
Cuando estamos en una infinidad de proyectos comunes con la República de Chile, como por ejemplo el proyecto Cruz del Sur para misiones de Paz de Naciones Unidas, que visitara recientemente el secretario general de las Naciones Unidas Ban Ki-Moon, en Campo de Mayo, propongo solicitar al gobierno de Chile que suspenda la conexión aérea entre Punta Arenas y Puerto Argentino, que sobrevuela territorio argentino.
Se debe recordar que en 1999 el gobierno chileno suspendió los vuelos entre Punta Arenas y Puerto Argentino en las islas Malvinas, con motivo de la detención del general Augusto Pinochet en Londres. El entonces presidente de Chile, Eduardo Frei, recomendó a la empresa LAN Chile que suspenda los vuelos a Malvinas a partir de abril de 1999. Los vuelos entre Punta Arenas y Puerto Argentino fueron suspendidos a partir del 27 de marzo de 1999. Con el regreso de Pinochet a Chile se restablecieron los vuelos el 16 de octubre de 1999.
Casi todos los organismos internacionales apoyan la postura argentina que Gran Bretaña tiene que sentarse a discutir el tema de la soberanía. Sin embargo, ni como potencia colonial, ni como miembro permanente del Consejo de Seguridad esta potencia histórica acepta ninguna de las resoluciones o declaraciones emanadas de los organismos internacionales.
El primer ministro inglés, David Cameron, en un alarde de totalitarismo ha dicho: "Mientras las Falklands (Malvinas) quieran seguir siendo territorio soberano británico, deben seguir siendo territorio soberano británico. Punto final de la historia".
Tal vez con estas palabras: Quiere compararse con el clásico y fracasado pronosticador Francis Fukuyama cuando escribió en 1989 que una vez caída la Unión Soviética se produciría el "Fin de la Historia"; y por esa causa existiría un solo mundo bajo el dominio de los Estados Unidos.
O mostrar sólo con palabras la valentía para enfrentar las críticas de los sindicatos que proponen una huelga general para el 30 de junio en respuesta al plan del primer ministro de reducir el déficit, que incluye la reforma el sistema jubilatorio, avanzar con los planes de despidos masivos y congelamiento de salarios.
Frente a este atropello de la potencia colonial sugiero tres alternativas:
1 A largo plazo: las razones han sido expuestas por la presidenta de la Nación, Cristina Fernández, en Posadas, el 16 de junio cuando dijo que vamos a seguir reclamando en todos los foros internacionales, "vamos a decir que en el Siglo XXI siguen siendo una burda potencia colonial en decadencia, porque el colonialismo es algo antiguo además de injusto. Lo vamos a decir sin cansarnos. Y lo harán los que vengan después de mí y los hijos de nuestros hijos, pero las vamos a volver a recuperar en el marco del derecho internacional y de la paz, que no les quepan dudas".
2 A mediano plazo: luego de la denuncia argentina de los acuerdos sobre petróleo, firmados entre Argentina y Gran Bretaña, este país comenzó la exploración de hidrocarburos en la zona de Malvinas en febrero de 2010 cuando se instaló la plataforma Ocean Guardian, que presta servicios a varias empresas petroleras. La pionera en este campo fue la compañía británica Desire Petroleum que perforó a una profundidad de 3.570 metros admitiendo que el petróleo de la zona no era económicamente rentable.
La segunda empresa, Rockhopper, en cambio anunció que había ubicado un pozo con un potencial de 250 millones de barriles de crudo comercialmente viable.
Nuestro país reclama permanentemente en organismos internacionales sobre esta actitud unilateral de Gran Bretaña. Además, por un decreto del Poder Ejecutivo impone sanciones a las embarcaciones que haciendo escala en puertos argentinos, lleguen a las islas Malvinas para reabastecimiento de las empresas petroleras. En este sentido se debe destacar, que además de Argentina, Brasil y Uruguay han impedido la salida de embarcaciones de aprovisionamiento con destino a las islas.
Usando las palabras de Guillermo Makin, hay que dificultarles la exploración petrolera ("La Nación", 28 de febrero de 2010).
3 A corto plazo: aislar las islas Malvinas del continente americano. A partir del convenio firmado en 1999, entre el primer ministro Tony Blair y Carlos Menem, la empresa aérea LAN Chile realiza viajes semanales entre Punta Arenas (Chile) a Puerto Argentino en las islas Malvinas. Una vez al mes la mencionada empresa hace una escala en la ciudad argentina de Río Gallegos, provincia de Santa Cruz. Además de estos viajes regulares, LAN Chile efectuaba viajes charter entre Punta Arenas y Puerto Argentino. Para estos viajes, fuera de los establecidos, la empresa solicitaba permiso de sobrevuelo a la República Argentina.
Debe consignarse que el turismo es el segundo rubro de importancia para los ingresos de los habitantes de las islas Malvinas, luego de los ingresos por canon de pesca que otorga a embarcaciones extranjeras.
"Los vuelos de LAN entre Punta Arenas y las Malvinas son el principal vínculo de comunicación para los kelpers (y los 70 chilenos que viven en las islas). Cada año se movilizan 3.000 pasajeros entre las dos ciudades, en un viaje que dura una hora y media" (revista Viva, 12 de junio de 2011).
Ante el pedido de la empresa LAN de realizar vuelos charter entre Punta Arenas y Puerto Argentino, el 3 de noviembre de 2003 el gobierno argentino anunció que rechazaría la solicitud y propuso la fecha del 15 de febrero de 2004, como inicio de vuelos regulares entre nuestro país y las islas, por parte de una aerolínea de bandera argentina.
El impacto de esta decisión argentina tiene una fuerte repercusión en las islas Malvinas y en el Reino Unido.
El secretario de Estado británico para Asuntos Exteriores, Hill Rammell, en un informe al Parlamento de su país, el 19 de enero de 2004, se queja por el impacto negativo que tiene para los isleños y para la industria turística la decisión argentina de no autorizar una serie de vuelos extras de la empresa LAN Chile. Además Rammell viaja a nuestro país el 16 de febrero con el objetivo de restablecer los vuelos charter.
La decisión argentina no fue modificada. El canciller argentino de entonces, Rafael Antonio Bielsa, afirma que entre noviembre y diciembre de 2003 se han autorizado cinco vuelos charter a LAN Chile.
Ante la reacción del primer ministro inglés, David Cameron, de poner punto final al tema de disputa de soberanía sobre las islas Malvinas, se hace necesario tomar otro tipo de medidas para impedir el avance permanente del Reino Unido sobre el Atlántico Sur, considerando que en la actualidad nuestras relaciones con los países de América del Sur son excelentes a través de la Unasur y su Consejo de Defensa.
Cuando estamos en una infinidad de proyectos comunes con la República de Chile, como por ejemplo el proyecto Cruz del Sur para misiones de Paz de Naciones Unidas, que visitara recientemente el secretario general de las Naciones Unidas Ban Ki-Moon, en Campo de Mayo, propongo solicitar al gobierno de Chile que suspenda la conexión aérea entre Punta Arenas y Puerto Argentino, que sobrevuela territorio argentino.
Se debe recordar que en 1999 el gobierno chileno suspendió los vuelos entre Punta Arenas y Puerto Argentino en las islas Malvinas, con motivo de la detención del general Augusto Pinochet en Londres. El entonces presidente de Chile, Eduardo Frei, recomendó a la empresa LAN Chile que suspenda los vuelos a Malvinas a partir de abril de 1999. Los vuelos entre Punta Arenas y Puerto Argentino fueron suspendidos a partir del 27 de marzo de 1999. Con el regreso de Pinochet a Chile se restablecieron los vuelos el 16 de octubre de 1999.