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Advertencia que obliga a pensar

*Por Eduardo Van Der Kooy. José Mujica, el presidente de Uruguay, sostuvo que el Mercosur está "estancado" (ver Mujica volvió con su reclamo por el Mercosur: "Estamos estancados"). También señaló que al bloque regional l e hace falta institucionalidad.

Y que habría perdido su atractivo internacional.

Las palabras del mandatario parecen sonar en un momento justo, ante un cuadro internacional que exhibe las dificultades de Estados Unidos y la crisis en Europa. Es decir, una ocasión propicia para la región si se comprenden las necesidades objetivas de cada país y se respetan las reglas de juego.

Mujica describió también el desorden que signa a los vínculos entre las naciones del Mercosur, donde el papel de la Argentina y Brasil resulta determinante. Los dos principales socios no se esmeraron en los últimos tiempos en fomentar aquella institucionalidad a la que refiere el presidente de Uruguay.

Buenos Aires, sobre todo, pero también Brasilia, depositan excesiva confianza en la buena química que siempre demostraron Cristina Fernández y Dilma Rousseff cada vez que se encontraron. Pero debajo del poder de ambas mujeres existe una estructura burocrática natural que, en este caso, tiende a complicar las relaciones bilaterales y el intercambio comercial.

El gobierno kirchnerista, en todos los planos, interno y externo, aporta poco en favor de mejorar los sistemas institucionales. Prefiere recurrir casi siempre a las resoluciones personales y también de índole providencial . Superpone funciones y genera peleas y confusión. Guillermo Moreno, por caso, tuvo días pasados declaraciones desmerecedoras hacia Brasil que no provocaron una réplica formal de Itamaraty por la mediación del canciller Héctor Timerman.

El secretario de Comercio acumula facultades que le confirió Cristina y que atentan, justamente, contra cualquier maquinaria institucional. Desde pasado mañana resolverá, junto a Ricardo Echegaray, titular de la AFIP, sobre todas las importaciones del país.

Brasil, entre otros, vaticina conflictos.