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Adolescente mata de un tiro a otro por unas zapatillas

Un joven de 16 años asesinó de un balazo en la cabeza a uno de 17 que lo había amenazado con robarle las zapatillas, en Rosario.

Un adolescente de 16 años, que caminaba con su novia por una calle de la localidad santafesina de Villa Gobernador Gálvez, mató de un balazo en la cabeza a otro de 17 que lo amenazó para robarle las zapatillas, informaron hoy fuentes policiales.

El hecho se registró ayer alrededor de las 13, cuando un joven de 16 años fue a buscar a su novia de la misma edad a la salida de un colegio secundario de la localidad de Villa Gobernador Gálvez, ubicada a 10 kilómetros al sur de Rosario, informaron las fuentes.

Según los primeros testimonios, la pareja caminaba y, a pocas cuadras de la escuela, fue interceptada por otro joven, de 17 años, que a punta de pistola les exigió las zapatillas que llevaban puestas.

La pareja se negó al pedido y salió corriendo, por lo que comenzó a ser perseguida por el ladrón, que la alcanzó a los pocos metros.

Los voceros informaron que en esa circunstancia se inició un forcejeo entre ambos muchachos, que cayeron al piso, y en ese marco se produjo un disparo en el que el menor de los adolescentes resultó herido.

A pesar de la lesión, ese joven aparentemente le arrebató el arma del ladrón, a quien le efectuó un disparo en la cabeza cuando aún estaban en el piso, dijeron los voceros consultados.

Ambos muchachos fueron trasladados heridos al hospital Gamen, de Villa Gobernador Gálvez, aunque el mayor de ellos murió debido a un tiro que recibió en la frente.

El otro joven, en tanto, presentaba una herida de bala en el antebrazo izquierdo, sin riesgo para su vida, por lo que fue dado de alta, agregaron los voceros.

El adolescente y su novia fueron traslados a la comisaría 26 y por disposición de la Jueza de Menores de 1ra. Instancia de Rosario, María del Carmen Musa, quedaron bajo arresto domiciliario.

Fuentes vinculadas al caso informaron a Télam que el joven declaró que al quitarle la pistola al agresor el tiro "se escapó".

En tanto, testigos circunstanciales del hecho, la mayoría estudiantes que salían del colegio, indicaron que el muchacho en todo momento trató de defenderse del agresor, que lo intimidaba con la pistola.

Voceros policiales indicaron que de los bolsillos del pantalón del atacante fueron secuestradas cuatro balas calibre 32.

Además, constataron que el joven muerto tenía desde el año 2005 ingresos en comisarías y que contaba con antecedentes penales por robo calificado y tentativa de robo, entre otros.