Admirador de la cultura samurai cumple su sueño
Se armó de paciencia y en dos años fabricó lo que había soñado desde los 16 años.
Los samurai japoneses son famosos en todo el mundo, pero un belga demostró estar muy apasionado con estos guerreros medievales y se fabricó su propia y auténtica armadura usando miles de piezas de metal y cientos de metros de soga.
Danny –tal el nombre del hombre fascinado por la cultura samurai- comenzó coleccionando espadas japonesas cuando tenía 16 años, y soñaba con tener su propia armadura algún día. No podía pagar las decenas de miles de dólares de un atuendo samurai, y las réplicas, a pesar de que eran más baratas, no estaban hechas para sus 2 metros de altura.
Aunque estaba por abandonar su sueño, algunos amigos lo ayudaron y ahora, con 42 años, Danny, cajero de un banco, pudo fabricar su propia armadura. Tal como lo hacían los artesanos japoneses de antaño, ensambló su traje protector con 3.000 piezas de metal, cada una de las cuales fue moldeada a mano con la forma y el tamaño correctos, enlazados con 225 metros de soga. Le llevó dos años terminar el trabajo, pero el resultado es simplemente espectacular.
No le fue nada fácil pues tuvo que investigar la historia de la cultura samurai. Su obra pesa nada menos que 35 kilogramos, y solo la puede usar él o alguien que tenga su talla.