Acoso sexual en Argentina: cifras alarmantes de mujeres desprotegidas

Tener la posibilidad de contar con un puesto de trabajo resulta crucial para la mayoría de la población. A excepción de lo que sucede con unos pocos privilegiados, la situación de desempleo es una de las más críticas que puede atravesar una persona. Atentos a esta necesidad de conseguir y también de conservar un puesto, existe un grupo de inescrupulosos que se aprovecha de la situación. Según el último informe de la Oficina de Asesoramiento sobre Violencia Laboral, 1 de cada 10 personas denunció haber sido víctima de abuso sexual en el trabajo.

El problema, que no es actual, resulta alarmante en nuestro país por su tendencia ascendente. Según el informe de la OAVL, el 81 por ciento de los denunciantes, en su mayoría, mujeres; refirió haber sido víctima del acoso psicológico. La particular modalidad se caracteriza por la constante profusión de comentarios sexuales y otras actitudes, que pueden ser miradas o posturas. El 9 por ciento de los afectados por este mal expresaron haber sido abusados físicamente en su trabajo. El porcentaje es considerablemente inferior porque este delito consiste en una acción extrema.

El informe detalla con claridad las afecciones a la salud que provoca este problema y refiere: "El impacto sobre la salud de la víctima depende de la duración del acoso, la intensidad de la agresión y de la propia estructuración psíquica y fortaleza del yo al momento de enfrentar la situación". Además, se explica que "cuando el acoso en cualquiera de sus formas es reciente y persiste en la víctima la ilusión de resolución, los síntomas son similares a los de estrés, con insomnio, migrañas, cansancio, etcétera".

"A medida que la situación persiste en el tiempo, surge el sentimiento de culpabilidad ya que al no poder tramitar en el afuera dicha situación la interpretación del hecho traumático está ausente y la persona se repliega sobre sí misma intentando buscar en soledad las razones del atropello, proceso reforzado por la falta de palabra, dada la incomunicación generada por vergüenza o temor a la falta de credibilidad", especifica el informe de la AOVL y deja en claro la importancia de detener al acosador a tiempo.

Como es lógico, la población más vulnerable es la más afectada por este fenómeno, ya que las personas de menores recursos y mayor necesidad sienten mayores presiones para conservar el puesto de trabajo. El informe dice al respecto: "(El acosos sexual en el trabajo) concita a los sectores más vulnerables de la sociedad ya que quienes la desarrollan son principalmente mujeres, pobres y migrantes. Para entender la importancia de esta actividad para la mujer, basta decir que más del 20% de las mujeres asalariadas del país está ocupada en el sector doméstico. Hoy esta actividad está totalmente feminizada, ya que pertenece a dicho género el 97% de la fuerza laboral".