Aberrante: una madre asesinó a su hijo de siete años porque le sacaron la custodia

Ana María Baños Lozano, una madre que estaba por perder la custodia de su pequeño hijo en El Ejido, Almería, España, lo mató para que el chico no quedara a cargo de su padre y expareja, Sergio Fernández López. El hombre había conseguido la guarda tres días antes del crimen, y su ex asesinó a Sergio, el hijo de ambos, cuando la Justicia la estaba por notificar de los cambios sobre la situación del menor. La acusada por el crimen quedó detenida.

El horroroso hecho se produjo en Las Norias de Daza, Almería. De acuerdo a los investigadores, la madre del nene lo estranguló. Los padres del menor, que se habían separado hace dos años, tenían denuncias cruzadas de maltrato y, mientras la mujer tenía la custodia de lunes a viernes, su exmarido la tenía los fines de semana.

La madre de Sergio había presentado una denuncia contra su expareja en abril de 2017. La Justicia dictó una orden de protección por indicios de maltrato y le concedió provisionalmente el uso de la vivienda y la guarda y custodia del menor. Este fallo se convirtió en sentencia definitiva en febrero de este año, y los padres acordaron un régimen de custodia y visitas.

Finalmente, las denuncias por malos tratos fueron archivadas y el padre volvió a reclamar la custodia del menor. A principios de septiembre el hombre presentó una demanda de modificación de medidas en la que pedía que se le concediera a la guarda y custodia de Sergio, al argumentar que "la madre no estaba cuidando de forma diligente del mismo en asuntos como asistencia al centro escolar o comidas equilibradas".

A comienzos de octubre la Justicia hizo lugar a su presentación y emitió una nueva sentencia, por la que Fernández López quedaría a cargo de la guarda y custodia del menor. La resolución se encontraba en trámite de notificación y fue dispuesta tres días antes del crimen. Finalmente Baños Lozano estranguló al nene poco antes de que le comunicaran de los cambios en relación al menor.

La acusada fue detenida por la Guardia Civil a partir de la denuncia de una vecina, que la vio con el nene en brazos y le preguntó por su estado, ya que le pareció que estaba muerto. Descubierta, la acusada trató de escapar en su auto pero no lo logró. La Policía la interceptó y tuvo que romper los vidrios del auto, ya que no quería salir.

El crimen generó una gran conmoción en la localidad española, donde decretaron tres días de luto con banderas media hasta por el asesinato del nene. El alcalde Ismael Torres explicó que la detenida es "una persona conocida del barrio" y se excusó de hacer mayores declaraciones. Dijo que desconoce si la acusada tiene problemas psicológicos y aclaró que por el momento el caso está bajo investigación, en secreto de sumario.