Justicia Cero
A seis meses del asesinato de Fernando Báez Sosa: el eterno dolor de sus padres
Al joven lo asesinaron brutalmente el 18 de enero en Villa Gesell. Hoy su familia sigue reclamando justicia.
Hoy se cumplen seis meses del brutal asesinato de Fernando Báez Sosa a la salida del boliche Le Brique, en Villa Gesell. Aquella madrugada, un grupo de rugbiers lo mató a golpes y patadas.
Ayer, un peritaje reveló un dato importante para la causa: la huella de la pisada que tenía Fernando en su cara corresponde a la zapatilla de Máximo Thomsen. Todo marcha ya camino al juicio de los rugbiers.
Sin embargo, hoy no es un día fácil para los papás de Fernando. Su mamá Graciela Sosa, reconoció que será un "día triste en sí, como todos los días". "Lo más difícil es el día a día", aseguró. Y remarcó que le parece que "el tiempo no pasó y que estos seis meses los pasó buscando recuerdos en cada cosa, en cada detalle".
"Estamos solos con mi marido, en casa, tratando de sobrellevar las cosas como podemos", ya que ambos están sin poder realizar sus actividades laborales por la pandemia de coronavirus. "La verdad que es muy triste, extrañamos muchísimo a Fernando y cada vez sentimos más la ausencia, lo necesitamos. Pero es una cosa imposible", aseguró Graciela a Clarín.
Cuenta que "los días se sienta en la cama de su hijo y repasa sus cosas, sus trofeos y notas". "Es que reviso y encuentro cosas y cosas, que voy acomodando, porque a veces me siento muy triste. Y cuando estoy triste me voy al cuarto de él. Me siento en su cama. Trato de rezar para tener un poco de consuelo. Me calma el alma, me calma el corazón", explica. Silvino se sienta con ella. La ayuda a revisar la ropa y se sumergen juntos en el recuerdo.
Ayer, un peritaje reveló un dato importante para la causa: la huella de la pisada que tenía Fernando en su cara corresponde a la zapatilla de Máximo Thomsen. Todo marcha ya camino al juicio de los rugbiers.
Sin embargo, hoy no es un día fácil para los papás de Fernando. Su mamá Graciela Sosa, reconoció que será un "día triste en sí, como todos los días". "Lo más difícil es el día a día", aseguró. Y remarcó que le parece que "el tiempo no pasó y que estos seis meses los pasó buscando recuerdos en cada cosa, en cada detalle".
"Estamos solos con mi marido, en casa, tratando de sobrellevar las cosas como podemos", ya que ambos están sin poder realizar sus actividades laborales por la pandemia de coronavirus. "La verdad que es muy triste, extrañamos muchísimo a Fernando y cada vez sentimos más la ausencia, lo necesitamos. Pero es una cosa imposible", aseguró Graciela a Clarín.
Cuenta que "los días se sienta en la cama de su hijo y repasa sus cosas, sus trofeos y notas". "Es que reviso y encuentro cosas y cosas, que voy acomodando, porque a veces me siento muy triste. Y cuando estoy triste me voy al cuarto de él. Me siento en su cama. Trato de rezar para tener un poco de consuelo. Me calma el alma, me calma el corazón", explica. Silvino se sienta con ella. La ayuda a revisar la ropa y se sumergen juntos en el recuerdo.
Dejá tu comentario