A lo Hangover: se emborrachó y amaneció con un par de anteojos tatuados en la cara
Fue una noche de mucho descontrol, tomó de más y se puso osado. Desde hace dos años está en tratamiento para borrarse el tatuaje.
El caso de este hombre de Gales parece sacado textual de la película Hangover (¿Qué pasó ayer?, en español), en la que uno de los protagonistas se despierta con un enorme tatuaje permanente en su rostro a pocos días de su casamiento.
Si bien este hombre no estaba por casarse y, a diferencia de Phill, ya contaba con algunos diseños en su piel, despertarse con un par de "Rayban" tatuados en la cara no eran el plan que más deseaba.
Luego de una intensa noche de juerga y alcohol, el hombre de las gafas corrió al baño a lavarse la cara con la esperanza de que el diseño fuese removible, pero eso no ocurrió.
Por eso, desde hace dos años se está sometiendo a un tratamiento para borrárselos. Aunque en un principio había decidido no quitárselo, fue objeto de muchas burlas y miradas, e incluso sentía que avergonzaba a su familia.
Finalmente, se dirigió a una clínica en el sur de Gales, con mucha preocupación. "Algunos amigos tienen cicatrices en el lugar en el que le sacaron sus tatuajes", explicó al diario Mirror. Aunque no se borró por completo, el tatuaje se nota muchísimo menos que cuando recién se lo hizo.
"No recordaba haberme hecho el tatuaje porque había salido de festejo y, cuando sucedió, estaba borracho. Al volver a casa obviamente fui objeto de un montón de miradas", confesó el Phill de la vida real.