DOLAR
OFICIAL $816.08
COMPRA
$875.65
VENTA
BLUE $1.18
COMPRA
$1.20
VENTA

A 9 años de la tragedia de Cromañón, Omar Chabán supera la quimio a pesar del bajo peso

Con un estado de salud delicado, el ex gerenciador del boliche recuerda su visión sobre los hechos.

A 9 años de la tragedia de República Cromañón, Omar Chabán habló desde una habitación del hospital Santojanni, en donde cumple con el arresto domiciliario debido a la grave enfermedad que padece (un linfoma de Hodgkin que estuvo a punto matarlo hace algunos meses).

El ex gerenciador del boliche, condenado a más de diez años, repasó su historia y la visión de los hechos de aquel 30 de diciembre de 2004: "Soy anti-libertad. La libertad crea gente boluda y violenta. Toda la vida fui negligente, nunca pude controlar la violencia", dijo a la revista Rolling Stone.

Cabe recordar que tras varias sesiones de quimioterapia, su cuerpo respondió favorablemente, aunque llegó a pesar tan sólo 50 kilos.

"Yo soy el mayor fracasado del éxito. Siempre me echaron de todos lados. Todo el mundo quería que me fuera del país. Y al final lo lograron, porque la cárcel es una isla", expresó.

Sobre los hechos de la tragedia, marcó: "Acá había una ideología de la bengala, una cosa viril y machista. Yo acepto mi responsabilidad en Cromañón, Callejeros también, pero el público es responsable con nosotros. No penalmente, pero sí a nivel social. ¿Por qué nunca nadie habla de ellos?".

Y agregó: "La idea de salir a la calle me da miedo. En una cárcel te cuidan, te dan cursos... Si lo tomás positivamente, es bárbara la cárcel. Nunca me habían pegado en la cárcel, pero acá en el hospital sí. Había dos locos de mierda, dos guardias del Servicio Penitenciario que están del tomate. Uno de ellos me humillaba mal, decía que tenía que hacer lo que él decía", dijo.

"La angustia que sentía por los muertos de Cromañón hoy la fui desplazando a las consecuencias que tuvo sobre mi familia: lo que he hecho sufrir a mi mamá, mis hermanos, mis sobrinos. Yo digo que lo único importante que hice en mi vida es hacer que los grupos ganen guita. De lo otro puedo estar hablando veinte horas. Pero lo importante es que, a partir de Cemento, los grupos empiezan a ganar guita sin tener que chuparle el culo a nadie", manifestó.

"Algunos quieren mi núcleo neurótico, no les alcanza con la condena. Pero no lo van a vencer. Porque después de los 50 años el núcleo neurótico no cambia. Lo dice Freud", finalizó.