A 20 años del asesinato José Luis Cabezas, el ataque que hizo tambalear la libertad de prensa
Fue hallado muerto en 1997 tras la difusión de una foto del empresario y presunto testaferro de Menem, Yabrán.
Cabezas apareció calcinado dentro de un auto, en un gran pozo, a 13 kilómetros de la ciudad balnearia de Pinamar. Desde un primer momento, el principal sospechoso fue el empresario Alfredo Yabrán, quien manejó un verdadero imperio desde las sombras durante la década de los 90 en Argentina.
"Ni los servicios de inteligencia tienen una foto mía", dijo alguna vez el poderoso empresario en una entrevista. Fue José Luis quien obtuvo esa primera foto y lo pagó con su vida.
Al cumplirse un nuevo aniversario de ese homicidio, ninguno de los condenados cumple su condena en prisión. Algunos recuperaron la libertad y otros murieron.
El 2 de febrero de 2000, tras un juicio oral y público, fueron condenados a prisión perpetua Horacio Braga, José Auge, Sergio González y Héctor Retana, integrantes de la banda "Los Horneros", así como Gregorio Ríos, jefe de Seguridad del empresario Alfredo Yabrán (quien se suicidó en 1998 luego de que la Justicia ordenara su detención), y los policías Sergio Camaratta, Aníbal Luna y Gustavo Prellezo.
Sin embargo, por diferentes motivos, ninguno cumplió la pena dispuesta, y el último en ser liberado fue Prellezo, quien ya gozaba de prisión domiciliaria desde 2010.
La foto que desencadenó todo
La foto que fue tapa de la revista Noticias el 3 de marzo de 1996 se convirtió en el principio del final para José Luis Cabezas. La imagen del empresario Alfredo Yabrán, caminando junto a su esposa en las playas de Pinamar, significó la sentencia de muerte para el fotógrafo.
Todo el periodismo estaba detrás del famoso empresario Alfredo Yabrán a partir de una denuncia que había realizado el entonces ministro de Economía del gobierno de Carlos Menem, Domingo Cavallo.
"Hay una mafia enquistada en el poder y su jefe es Alfredo Yabrán", declaró en público el funcionario. La prensa lo buscaba pero no lo encontraba. No sabían cómo era su rostro. Su figura nunca había trascendido en los medios de comunicación.
Cabezas fue ejecutado de dos balazos en la cabeza y prendieron fuego su cuerpo junto al Ford Fiesta Blanco que utilizaba para trasladarse en Pinamar. La foto a Alfredo Yabrán en la playa marcó el final de su vida. La foto de la cara de José Luis Cabezas se convirtió en un ícono de la libertad de expresión.