2011: Prometen iniciar obras en el Riachuelo
Según Luis Armella "el desafío en 2011 será iniciar las grandes obras de infraestructura en el Riachuelo".
El juez federal de Quilmes, Luis Armella, aseveró que el desafío para este 2011 es llevar a cabo la ejecución del fallo Mendoza, dictado por la Corte Suprema, en el que ordenó el saneamiento de la Cuenca del Río Matanza – Riachuelo, según fuentes judiciales.
Respecto a la causa, Armella afirmó que: "Lo primero que se hizo, y que costó mucho trabajo, fue lograr el fortalecimiento institucional, lograr que ACUMAR –Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo- exista como tal, ordenarla y ponerla en funcionamiento y hacerla respetar, fortalecerla desde el lugar del juzgado, hacer valer sus actuaciones, en todo el aspecto normativo que hubo que crear, el aspecto reglamentario, y poner esto en funcionamiento".
Asimismo, añadió que "fue sobre todo un gran desafío sociológico cultural que había de crear una autoridad de cuenca, y ver que los tres Estados tenían que trabajar en función de la cuenca, y pensar en la cuenca como tal, o sea en el concepto hidrográfico y político de cuenca, por sobre el de los Estados".
El Magistrado, sostiene que: "Hemos logrado la autonomía financiera de la ACUMAR, independientemente de la injerencia de los Estados, es decir esterilizarlos un poco de las influencias de los diferentes estados y los interés locales y hasta partidarios. Entender a la ACUMAR como un organismo con una política de estado que trascienda el mosaico político y el calendario electoral".
"El gran desafío del año próximo se dará con el inicio de las obras importantes, las grandes obras de infraestructura, pero sobre bases solidas. Quizás todo esto no se vio, y por ahí se piensa que no se ha hecho nada en estos años, no fueron años perdidos, fueron años importantes y fundacionales, para que las obras se puedan hacer y sobre eso construir sólidamente, con un visión de política de estado", dijo y agregó que: "Lo que se busca es cumplir con la gran responsabilidad, y con el objetivo final, que es el saneamiento del Riachuelo”.
Para alcanzar la meta, estableció, que: “No hay algo que sea lo más difícil, son varios aspectos, problemas técnicos, problemas jurídicos, problemas sociales, sociológicos, culturales. El problema más difícil es la falta de credibilidad de la gente, por tantas veces que se han prometido cosas que no se han cumplido, el secreto está en la continuidad, en la estabilidad y en el que se entienda que no va a haber otro rumbo, que este".
Respecto a la causa, Armella afirmó que: "Lo primero que se hizo, y que costó mucho trabajo, fue lograr el fortalecimiento institucional, lograr que ACUMAR –Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo- exista como tal, ordenarla y ponerla en funcionamiento y hacerla respetar, fortalecerla desde el lugar del juzgado, hacer valer sus actuaciones, en todo el aspecto normativo que hubo que crear, el aspecto reglamentario, y poner esto en funcionamiento".
Asimismo, añadió que "fue sobre todo un gran desafío sociológico cultural que había de crear una autoridad de cuenca, y ver que los tres Estados tenían que trabajar en función de la cuenca, y pensar en la cuenca como tal, o sea en el concepto hidrográfico y político de cuenca, por sobre el de los Estados".
El Magistrado, sostiene que: "Hemos logrado la autonomía financiera de la ACUMAR, independientemente de la injerencia de los Estados, es decir esterilizarlos un poco de las influencias de los diferentes estados y los interés locales y hasta partidarios. Entender a la ACUMAR como un organismo con una política de estado que trascienda el mosaico político y el calendario electoral".
"El gran desafío del año próximo se dará con el inicio de las obras importantes, las grandes obras de infraestructura, pero sobre bases solidas. Quizás todo esto no se vio, y por ahí se piensa que no se ha hecho nada en estos años, no fueron años perdidos, fueron años importantes y fundacionales, para que las obras se puedan hacer y sobre eso construir sólidamente, con un visión de política de estado", dijo y agregó que: "Lo que se busca es cumplir con la gran responsabilidad, y con el objetivo final, que es el saneamiento del Riachuelo”.
Para alcanzar la meta, estableció, que: “No hay algo que sea lo más difícil, son varios aspectos, problemas técnicos, problemas jurídicos, problemas sociales, sociológicos, culturales. El problema más difícil es la falta de credibilidad de la gente, por tantas veces que se han prometido cosas que no se han cumplido, el secreto está en la continuidad, en la estabilidad y en el que se entienda que no va a haber otro rumbo, que este".