Por paradójico que suene, es posible hacerse una “escapadita” sin moverse de la ciudad. Armate la valija que te llevamos a un hotel-museo con mucha historia dentro del Casco Histórico, una especie de oasis escondido entre la muchedumbre donde podrás disfrutar de un jardín nativo, mucho arte y lo mejor de la comida peruana gourmet.
DOLAR
COMPRA $1155.00
VENTA
COMPRA $1165.00
VENTA
Mariela Blanco
En Argentina, se conserva la tradición de regalar huevos de Pascua decorados artesanalmente con glasé multicolor o bien en chocolate. Repasamos la historia de esta costumbre, quiénes fueron los principales promotores desde la mitad del siglo XX hasta nuestros días y las tendencias en arte efímero de chocolate.
Hoy les mostramos la más completa colección de armas de Sudamérica. Además de mosquetes, fusiles, carabinas y ametralladoras, se pueden ver uniformes, modelos a escala y una sorprendente sala de armas orientales. Todo presentado por épocas prolijamente dispuestas y exhibidas. Bienvenidos al Museo de Armas de la Nación, que en el marco del cuadragésimo aniversario de la Guerra de Malvinas, adquiere una significación especial.
Si bien en el campo de la numerología el dos es el número de la empatía, son muy pocos los que reparan en los sub, los vices y los bis. ¿Acaso alguien recuerda a todos los vicepresidentes argentinos y subcampeones de los mundiales de fútbol? Lo mismo le pasa a un grupo de edificios y monumentos que quedaron en el escalón de abajo del podio de la fama.
Casi 90 abriles diría Julio Sosa que tiene Luis Grossman, arquitecto, periodista, hincha de Independiente y hombre de Buenos Aires. En su paso por la función pública, no se llevó nada; al contrario: le dejó a la Avenida de Mayo unos banquitos muy oportunos para que los transeúntes puedan sentarse a mirar las cúpulas de los magníficos edificios de la Belle Epoque. Entre los gustos que se dio en su profesión, rescata una entrevista a Jorge Luis Borges que terminó casi abruptamente cuando el autor de Fervor de Buenos Aires se dispuso a tomar la sopa. Una anécdota sin desperdicio de un gran profesional de la vieja escuela.
El patrimonio arquitectónico porteño no sólo está allí para que los entendidos le practiquen una "autopsia" técnica, sino que también nos permite tejer y destejer relaciones de la gente que los habitó. En esta nota, nos daremos la licencia de desacartonar la historia y al mejor estilo de aquellos juegos educativos que vienen al final de las revistas infantiles, vamos a tratar de unir tres construcciones que tienen algo en común. ¿Quién se anima?
Del hombre incomprendido al artista de culto en un sinfín de imágenes libre de marcos.
Ni la alarma del despertador tiene ganas de sonar cuando canta el gallo pero ahí estamos todos en fila una hora después tacleando a otro pasajero del subte para ganarle el asiento. Que no panda el cúnico, tengo un plan que no falla si tu cerebro marca “low batery”. Armate el bolso que te llevo a un convento histórico rodeado de bosques y ríos capaz de amansar al más extenuado bicho de ciudad.
Hoy les proponemos un viaje que involucra a todos los sentidos. Recorreremos los sabores amados por Jorge Luis Borges y los aromas nacidos en el país del sol naciente. Haremos un paréntesis en la espiritualidad de la música oriental para movernos al ritmo explosivo de un buen saxo, guitarra y contrabajo. Bienvenidos a bordo.
La traducción de “sans souci” vendría a ser algo así como “sin preocupación”. Y esas dos palabras en francés que le dan nombre al Palacio ubicado en el partido de San Fernando describen perfectamente la atmósfera de este micromundo mágico verdaderamente ideal para tomarse una pausa de los conflictos cotidianos o, en todo caso, digerirlos con un buen té y unas ricas masas.