La carambola del Primo Jorge altera la problemática nacional.

Emerge el otro triángulo poderosamente blindado.

En la vida del ludópata y de su familia, cuando blanquea su situación, hay un personaje siempre presente: los prestamistas.

Davos, para Milei, fue como Vicentín para Alberto. La cripto superchería equivale a la “fiesta de Olivos”.

Entre la corbata carmesí de Trump y la cripto superchería de Davis.

Desde El Furia al Panelista, con escala en el Ángel, La Doctora y el Poeta Impopular.

Mientras los psicólogos estamos recibiendo pacientes y familiares atravesados por la adicción a estas timbas de nuestra época, desde arriba las alimentan.

Cualquier otro mortal en su situación, quedaría preso hasta el juicio oral, estos son los síntomas de nuestro tiempo, una justicia para ricos y famosos y otra para los pobres…

Nos toca pensar el mundo, pero de verdad, y comprometiéndonos afectivamente. Nos toca pensar el mundo, pero de verdad, dejando de a ratos el celular y las redes sociales.

El Fenómeno Milei se diluye en la dinámica de la trolocracia.