* Por Roberto García Moritán.El terremoto en Japón deja muchas enseñanzas, en particular en lo que hace a los riesgos del uso de la energía nuclear. El incidente pone en evidencia la significación que reviste la seguridad nuclear a la hora de diseñar, construir y mantener una central nucleoeléctrica.
DOLAR
COMPRA $875.65
VENTA
COMPRA $1.20
VENTA
- Javier Milei piensa incluir el proyecto de privatización de Aerolíneas Argentinas en sesiones extraordinarias
- Luis Caputo aseguró que el cepo al dólar finalizará en 2025 y confirmó la baja del dólar tarjeta
- Habló la mujer que fue apuñalada por su ex en una pizzería de Núñez: “Me quiso matar como un animal”
- El jefe de la Fuerza Aérea echado por el Gobierno habría hecho 32 vuelos particulares en aviones militares
japón
* Por Arturo Lafalla. El autor propone que los argentinos aprendamos de las enseñanzas del desastre japonés.
* Por Martín Granovsky. Nicholas Kristof, el periodista de The New York Times que fue jefe de la corresponsalía en Tokio, dice que los japoneses tienen una palabra intraducible, gaman. Significaría algo así como sobreponerse a la dificultad.
Lo dijo el organismo estadounidense de control del sector, Nuclear Regulatory Commission, con el objetivo de enfriar los reactores nucleares dañados.
El agua de refrigeración del núcleo se evaporó, las barras de combustible nuclear están completamente secas y el peligro de una fusión del núcleo del reactor aumentó considerablemente.
La policía nipona dio a conocer hoy el número de víctimas fatales que dejó el devastador terremoto y tsunami del viernes, aunque autoridades locales temen que el número real de muertos supere los 10.000.
Las autoridades japonesas emitieron este lunes una nueva alerta por un tsunami con olas de hasta tres metros de altura para toda la costa del Pacífico.
Raúl Dejean destacó hoy que tras la fuga de gases "el temor quedó disipado" sobre posibles riesgos para la salud y confirmó que no había argentinos heridos tras el tsunami.
Así lo confesó hoy en relación a la tragedia que está viviendo el pueblo japonés tras el sismo y tsunami que azotó a la isla el pasado viernes.
Unos 100.000 militares japoneses, apoyados por socorristas de casi 70 países y un portaaviones estadounidense, trabajan desde hoy en el complicado operativo de rescate en el noreste de Japón tras el fuerte terremoto y tsunami del viernes.