Otra vez, varias fugas escandalosas. Otra vez, presos que se van como quieren. Otra vez queda la duda si fueron audaces para escapar, o los dejaron ir.

Ocurrió en agosto pasado. Los presos escaparon tras una maniobra de película.

Seis reclusos de la cárcel de Coronda se escaparon del penal tras violentar un candado y pasar por un conducto de aire, y aún permanecen prófugos, informaron fuentes policiales.

Lo habían esposado a una reja, porque la seccional no tiene calabozos. Forzó el hierro y huyó

Hicieron un boquete en la pared que daba al patio de la comisaría. Ningún policía escuchó nada.

Tres de ellos fueron recapturados. Habrían limado o forzado los barrotes.

Ellos son presos violentos, pero aunque parezca increíble, terminan perdiendo de la forma más burda. Los mata la familia, los puede la mamá, los puede el papá, los puede una amante.

Ariel Abollo Gómez, de 39 años, saltó el límite perimetral de la Unidad Carcelaria 10, de régimen abierto.

La increíble sangría de reclusos en los últimos meses tuvo su correlato en la toma de rehenes en Tortuguitas.

Se fugaron por los techos de la correccional durante el horario de visitas. La Policía Bonaerense realiza un operativo para dar con su paradero.