Los gremios docentes de la provincia de Buenos Aires cumplieron una jornada de paro y advirtieron que se podría complicar el inicio del ciclo lectivo 2012, si no hay un acercamiento con el Gobierno bonaerense en materia salarial.

La medida de fuerza la adoptaron ayer, tras fracasar la reunión que mantuvieron con autoridades del gobierno provincial, al que le reclaman un aumento salarial para los maestros.

La Presidente encabezará un acto en la avenida Lynch, por la inauguración de obras de asfalto, desagües e iluminación en el límite entre los partidos bonaerenses de Avellaneda y Quilmes.

El gobierno bonaerense dispuso un aumento del 22 por ciento para los funcionarios y empleados jerárquicos de carrera, según se informó oficialmente.

Los profesionales de la Salud nucleados en la Cicop iniciaron hoy un paro de actividades de 72 horas mientras plebiscitan entre sus afiliados la oferta salarial del gobierno bonaerense.

Médicos y otros profesionales de los 77 hospitales de la provincia de Buenos Aires iniciaron hoy un paro de 72 horas en demanda de mejores salarios y pese a la conciliación obligatoria dispuesta por las autoridades laborales.

"Sólo registraron dos casos importados", afirmó el ministro de Salud, Alejandro Collia, que convocó a los secretarios del área de los 134 municipios bonaerenses por el brote en Santa Fe.

El gobierno bonaerense intensificó los operativos viales en las rutas durante este mes. La medida se focaliza especialmente en los dos feriados largos de marzo e incluyen acciones en zonas urbanas de La Plata y el Conurbano. Durante todo el fin de semana se registró un intenso movimiento en la Autovía 2.

Los principales gremios de docentes bonaerenses aceptaron hoy la propuesta que entregó el gobierno provincial y finalmente cerraron el acuerdo, por lo que el lunes se iniciará el ciclo lectivo 2011.

*Por Osvaldo Pepe. Las revueltas por las tierras en Villa Soldati y en Villa Lugano, y las tomas de terrenos en el GBA y otros puntos del país, aún estremecen la escena política. Entre otras cosas, obligaron al Gobierno a una súbita voltereta sobre los principios que había defendido a capa y espada 7 años y medio, con un discurso regimentado que se pretendió sin fisuras.